Piensas que ya tienes el arte de las selfies dominado, pero sorprendentemente, hay varias cosas en las que pensar cuando te tomas una selfie.
¿Cómo deberías posar? ¿Deberías sonreír o hacer un puchero? ¿Cuál es tu mejor ángulo? ¿La iluminación es buena? ¿Y tu cabello?
Sí, sí, ya sabes todo esto, pero ¿cuál es la cosa que la mayoría de las personas olvida considerar al tomarse una selfie?
Dónde mirar.
Sé que parece obvio, pero créeme, mucha gente sonríe y espera lo mejor sin considerar su mirada.
Eso ya no más.
Aquí tienes algunas opciones y consejos para ayudarte a enfocar tu atención y lograr una selfie de 10.
Directo a la cámara
Quizás el lugar más obvio y cómodo para mirar es directo a la cámara.
Nota que dije "a la cámara," no "a ti mismo en la pantalla." Es un cambio sutil, pero que hará una gran diferencia.
Cuando te miras a ti mismo en tu selfie, probablemente consideras lo que puedes cambiar, lo cual termina reflejándose en tu rostro, incluso si estás sonriendo.
No es buena idea.
En su lugar, intenta mirar a la cámara real. No solo te obligará a dejar de concentrarte en tu propio rostro, sino que también tendrás un aspecto más natural.
Piensa en esto: sabes cuando hablas con alguien y puedes notar que está mirando por encima de tu hombro? Bueno, este es el equivalente en selfies. Mirar al lente es como hacer contacto visual real con quien ve la foto. Mucho mejor.
Hacia un lado
A veces, si no quieres mirar directamente al lente, puedes intentar mirar hacia un lado.
Recomiendo mucho implementar este pequeño truco cuando te tomes una selfie con un amigo.
¿Por qué?
Bueno, principalmente porque tiende a dar una sensación más espontánea que si ambos miran a la cámara. Solo no mires demasiado lejos, o podrías terminar luciendo un poco raro con todo el blanco de tus ojos visible. No, gracias.
Si no sabes cuánto desviar la mirada, piensa en la cámara de tu teléfono como la posición del mediodía en un reloj. Trata de mantener tu enfoque entre justo al lado de tu teléfono y donde estaría la una en punto. Si comienzas a enfocar más allá, corres el riesgo de la mirada perturbadora de ojos en blanco.
La mirada hacia arriba
Seamos sinceros: a veces queremos una selfie que se salga del típico y convencional.
Dale la bienvenida a la selfie de mirada hacia arriba. O, lo que quizás se describa más precisamente como la "selfie mirando hacia arriba."
La clave para lograr esta selfie es asegurarte de que el resto de tu rostro coincida con tus ojos. No se permite sonreír. En su lugar, se trata de esa actitud. Intenta hacer un puchero, morderte el labio y fruncir el ceño para ayudar a enfocar la atención en algo más.
Además, ten en cuenta que no todos pueden lograr una selfie de mirada hacia arriba, así que definitivamente inténtalo en privado para asegurarte de que puedes lograrlo.
Ojos cerrados
¿Alguien dispuesto a eliminar el problema de no saber dónde mirar por completo?
Si levantaste la mano, te encantará la idea de cerrar los ojos en una selfie.
Así es, hay algunas ocasiones donde cerrar los ojos puede hacer que la foto se vea mejor porque ayuda a evitar la incomodidad de no saber dónde mirar.
Cerrar los ojos también da la sensación de que estás súper feliz o realmente en el momento, lo que te gana algunos puntos importantes de selfie.
Por ejemplo, ¿sabes cuando te ríes tanto que cierras los ojos? ¿O estás en un festival de música y cierras los ojos para escuchar la música?
Bueno, tomarte una selfie con los ojos cerrados puede darle a tu foto esa misma sensación, como si estuvieras pasando el mejor momento de tu vida.
Solo ten en cuenta que con los ojos cerrados, el enfoque de la foto probablemente estará en tu boca, así que asegúrate de estar sonriendo, ¿vale?
El punto clave sobre dónde mirar al tomarse una selfie:
Hay mucho más en lograr una buena selfie que solo mirar tu teléfono.
Así que la próxima vez que estés tomando fotos, considera a dónde estás mirando.
Y oye, mientras tanto, prueba algunos estilos diferentes para ver cuáles funcionan para ti y cuáles definitivamente no.
Haz esto y ya estarás un paso adelante.
